En los últimos años hemos visto cómo el mercado de cómic infantil y juvenil se ha ido recuperando y se ha multiplicado la oferta de títulos en un nicho que estaba un poco olvidado hasta hace poco. Basta un echar un vistazo a las más de trescientas novedades mensuales que aparecen en las librerías, para notar que muchas de ellas buscan un público joven para atraerlo al mundo de las historietas. Y una de las lecturas que parece que más ha sintonizado con el lector juvenil es Leñadoras, de la que nos llega ya su cuarto tomo recopilatorio de manos de Sapristi y cuyo primer volumen lleva ya cuatro ediciones. Una serie que en los Estados Unidos ya supera los 50 números en formato grapa editados por Boom! Studios, varios premios Eisner en la categoría de mejor serie adolescente y mejor nueva serie y de la que está en marcha un proyecto para su adaptación a la pequeña pantalla.
Leñadoras aglutina una cantidad de ingredientes que lo tienen todo para ser irresistibles para ese público. Está protagonizada por cinco jóvenes que pasan su verano en el Campamento Miss Quinzella Thiskwin Penniquiqul Thistle Crumpet para Chicas Hardcore, cada una con una personalidad diferente, para poder escoger favorita, pero todas unidas por una profunda amistad y unas ganas infinitas de vivir aventuras. Estas no faltan y acontecen a un ritmo imparable. En este tomo en concreto, primero tienen que salvar de las garras de un pájaro gigante a las alma máter del campamento, luego lidiarán con el regreso de una antigua conocida de la serie, la diosa Diana, castigada por su padre Zeus a regresar a la tierra donde tendrá que colaborar con sus antiguas enemigas para resolver el misterio de la conversión de unas compañeras en estatuas de piedra.
Un tomo que reúne ocho números americanos, dos arcos argumentales, en el que se mantiene la autoridad múltiple, marca de la casa. En esta ocasión los guiones corren a cargo de la propia Shannon Watters (una de las co-creadoras de la serie) y Kayth Leyh, mientras el dibujo lo llevan Carey Pietsch, Ayme Sotuyo y Maarta Laiho. Una tendencia multiautoral que se mantiene desde el principio y que se caracteriza porque desde las guionistas y dibujantes, hasta las coloristas, rotuladoras o editoras son mujeres. Con una intencionalidad claramente reivindicativa. Una reivindicación que también se plasma en las historias, donde el protagonismo femenino es absoluto, y las soluciones a los problemas siempre buscan alternativas pacifistas y que muestren el empoderamiento de las protagonistas para resolver los problemas de forma proactiva, ingeniosa y lejos del uso de la violencia. Historias que además juegan con la mitología clásica o con el conocimiento de la naturaleza de forma lúdica. Y con mucho humor. Guiones ingeniosos, acción a raudales, dibujo atractivo en la línea de los dibujos animados más actuales. Lo dicho, todos los ingredientes para atrapar a los jóvenes lectores en una fórmula que funciona deliciosamente, volumen tras volumen.