Confieso que la primera vez que vi Evangelion no me gustó nada. No recuerdo muy bien cómo pero acabé con la serie completa descargada en mi ordenador. Cómo tenía las voces en castellano, podía mirar los capítulos distraía mientras hacía los deberes, y, debido al poco caso que le hacía, no entendía cómo una serie de robots gigantes se había vuelto de pronto tan oscura y triste. Al final, la acabé dejando por pereza y Evangelion se convirtió en el anime aquel del chiste de “métete en el robot, Shinji”.

Evangelion es una serie hasta arriba de prejuicios, precisamente por ser tan famosa e icónica no deja indiferente a nadie. Me da un poco de vergüenza reconocer que yo también me quejaba de lo tonto y débil que es Shinji y lo ridículo que resulta al llorar todo el rato y no querer meterse en el dichoso robot, a pesar de ni siquiera entender bien su comportamiento. No es que Evangelion sea poco convencional, pero se aleja a lo que se suele entender por anime, es decir, cosas como Dragon Ball, Oliver y Benji o Digimon, historias de aventuras y rivalidad sin excesiva carga psicológica. Evangelion, por otro lado, es desagradable y dura y sus primeros capítulos más ligeros y divertidos pueden llevar a error. Recientemente volví a ver el anime completo seguido por las películas y el manga. Descubrí que me sentía bastante identificada con Shinji y que donde antes veía personajes molestos y una trama liosa, ahora había una historia compleja, llena de detalles que daban textura a la trama.

¿A qué viene esta turra con Evangelion? Pues que todos tenemos nuestra propia historia con esta serie, un anime que si bien, como se dice en este libro, es fruto de su tiempo y una larga tradición de manga y anime, sí ha supuesto una fuente de inspiración incluso a día de hoy. Tú (no) necesitas ser un héroe, libro escrito por Álvaro Arbonés (Zaragoza, 1988), sirve para limpiar todos aquellos prejuicio en los que se envuelve esta serie. Dividido en capítulos que diseccionan el anime en partes más o menos temáticas, explica de forma precisa y profunda la trama, las relaciones entre personajes y todas aquellas sutiles lecturas que se pueden pasar por alto. Además de complementar toda esta información con el contexto histórico en Japón (como la secta Aum Shinrikyo o la crisis de los años noventa) así como la reinterpretación de Evangelion a través de sus películas. Aunque, por supuesto, hay muchas cosas que tienen distintas interpretaciones Tú (no) necesitas ser un héroe es una lectura muy interesante tanto por volumen de información, como por la forma en la que está escrita. Un libro para los fans acérrimos de Shinji, Asuka y Rei y para aquellos que quieran meter los pies en este pozo que es Neon Genesis Evangelion.