Paco Baena se ha encargado de comisariar una exposición muy peculiar que, en estos momentos acoge el Centro José Guerrero de Granada. Viñetas Desbordadas es una muestra que propone abordar una nueva relación entre el cómic y el museo, mediante un nuevo formato: el cómic de exposición. Así, los espacios que acogen la exposición pasan a ser el cómic. Se sustituye la página por la puesta en sala, se explora el espacio tridimensional para producir una verdadera expansión del campo gráfico, donde el lector pueda sumergirse físicamente y recorrerlo. Los autores responsables de realizar el encargo son Max (Barcelona, 1956) y Sergio García (Guadix, 1967). A ellos se ha sumado la académica Ana Merino (Madrid, 1971).
Max presenta La línea, un proyecto compuesto por tres historias. Dos de ellas se desarrollan en las paredes del Centro: Vida de Ubrut, encargado de mantenimiento, cuyo protagonista está basado en el Ubú rey de Alfred Jarry; y Vladimir & Estragón, personajes que salen del libro en busca de Godot. Todas las tramas se enlazan en La farsa de Vladimir y el Caballo Blanco, donde conversan los personajes de Beckett y de El público de Lorca.
Sergio García, por su parte, articula una narración multilineal que discurre por la cotidianidad de sus seis protagonistas, dividida en doce paneles murales que se corresponden con las doce horas del día. Construye un plano de ciudad continuo del que surgen todas las tramas urbanas, a modo de mapa.
Ana Merino hace una interpretación teórica y poética del proyecto. Ella misma recita los siete poemas de que consta su intervención, escrita y sonora, que trata sobre las historietas de Max y de Sergio García y evoca además temas como el peso de la energía creativa, la voz dibujada, la onomatopeya gráfica o los espacios desbordados. La intervención de Ana Merino se desarrolla en buena parte en el libro que se ha publicado con motivo de la exposición. Este libro forma parte de la exposición y no es un catálogo de los dibujos de Max y Sergio García, sino que muestran el proceso creativo de los autores que les ha llevado a la obra final.
Max, de visita en Barcelona durante el mes de noviembre para presentar su genial El rey carbón (La Cúpula, 2018), se mostraba encantado con este proyecto, que consideraba una progresión natural del hilo que desenreda en su último trabajo, a propósito de la evolución del arte de narrar mediante el dibujo, desde los murales prehistóricos hasta las técnicas industriales de reproducción. También estaba esperanzado en la posibilidad de itinerar la exposición. De momento, toca desplazarse hasta Granada. Tenemos hasta el 24 de marzo.